Como Unidad Pastoral, queremos expresar nuestro más sincero y profundo agradecimiento a todas las personas que, con generosidad y compromiso, nos han acompañado y apoyado en las diversas actividades realizadas durante este primer semestre. Gracias a su valiosa colaboración, hemos podido vivir con mayor profundidad el carisma de la Madre Paulina von Mallinckrodt, cuyo espíritu de servicio, entrega y amor fraternal continúa inspirando y guiando nuestra misión evangelizadora.

A lo largo de estos meses, hemos contado con la participación activa de estudiantes, apoderados, docentes y miembros de nuestra comunidad en numerosas instancias de fe y servicio, entre las que destacamos:

Atención, en cuatro oportunidades, al Comedor Solidario de la Parroquia Santos Juan y Pedro.

Realización de campañas solidarias: Campaña del Kilo, Coaniquem, Fundación Las Rosas y la Campaña de Cuaresma, en la que logramos reunir un total de $1.376.550.

Celebraciones eucarísticas con apoderados a las 7:40 hrs.

Eucaristías familiares en el Templo Catedral y celebraciones especiales en el Templo San Francisco.

Eucaristías catequéticas por curso, fomentando la formación cristiana.

Participación de nuestros catequistas en una estación del Vía Crucis organizado por la Parroquia Catedral.

Jornadas pastorales con estudiantes desde 7º básico hasta IVº medio.

Celebración del Jueves Santo, la Vigilia de Pentecostés y la Pascua de Resurrección.

Reuniones y coordinación con apoderados delegados de pastoral y delegados por curso.

Espacios de oración comunitaria.

Celebración de 44 primeras comuniones y 7 bautismos, acogiendo con alegría a nuevos integrantes de nuestra Iglesia.

En el marco del Año Jubilar, realizamos una misión con los jóvenes de nuestro colegio en la Parroquia Todos los Santos de Los Lagos, con dos visitas de pre misión.

Todas estas acciones han sido posibles gracias a la dedicación, el entusiasmo y la fe compartida de quienes forman parte de nuestra comunidad educativa y pastoral.

Agradecemos de corazón su apoyo, testimonio y compromiso. Que el Señor continúe bendiciendo abundantemente esta misión que compartimos, y que el segundo semestre sea una nueva oportunidad para seguir creciendo en la fe, el amor y el servicio.